Mirarnos en espejos ajenos – Periódico El Caribe
Una de las consecuencias más funestas que acarrean la corrupción y la impunidad es que profundizan los niveles de pobreza y la falta de oportunidades, y erosionan los niveles de confianza y credibilidad en las autoridades, los partidos políticos y el sistema, a la vez que vuelcan a muchos escépticos...