Santiago. Las escuelas Ramón Rodríguez de Canca la Reina y Las Charcas en Santiago cumplen una década en estado de abandono y arropadas por la maleza.

La institución educativa que está ubicada en la comunidad Los Paulino del distrito municipal de Canca la Reina en la parte baja de Moca en la provincia Espaillat inició su construcción en el año 2013 y desde entonces las autoridades se han olvidado en retomar los trabajos.

A pesar de que la escuela le queda frente a su casa, Geonavia Albania Tavárez, dijo que su hija que cursa el tercer grado de bachillerato debe trasladarse hasta el municipio de Licey al Medio en la provincia de Santiago.

“Antes nuestra preocupación era solamente la terminación del espacio. Ahora es utilizado para la crianza de vacas, y por el descuido, empiezan a salir grandes culebras y ratones”, dijo Tavárez a elCaribe.

Falta atención

Los tres edificios de dos niveles como el comedor y el área de dirección se encuentran arropados por la hierba.

“Nosotros para protestar lo hacíamos celebrando un cumpleaños. Desde hace un tiempo decidimos dejarlo, debido a que notamos que las autoridades del Ministerio de Educación y el Gobierno en sentido general se han hecho los sordos y ciegos ante los clamores de la comunidad”, apunta Domingo Paulino, residente en la zona.

En la zona de Santiago hay al menos 20 escuelas que esperan por su terminación. Una de estas está ubicada en la comunidad Las Charcas al suroeste de Santiago que lleva diez años en espera de su conclusión. En la gestión de Antonio Peña Mirabal como ministro de Educación, se informó que el centro educativo al igual que otras escuelas tenía un nudo legal, debido a que el ingeniero que estaba a cargo de la obra se había marchado del país.

Comunidades exigen que terminen varios centros

Actualmente los casi 500 estudiantes de las tandas matutina y vespertina toman docencia en la escuela Regina Altagracia Tavárez, de Las Charcas, levantada en el año 1977 y que por la falta de aulas provocan que los alumnos reciban clases en condiciones precarias. La Asociación de Profesores ADP ha mostrado su preocupación por la falta de aulas.