En inagotable creatividad –escribía libros, grababa canciones-; preocupado por el desarrollo social, cultural y político del pueblo; estremecido por el desastre sanitario y económico de la enfermedad del nuevo coronavirus, la cual él particularmente venció; cantando, bailando. Así, humana y artísticamente activo, sorprendió la muerte a nuestro Johnny Ventura a sus 81 años. Apenas hace una semana tuvo entrevista, ahora histórica, en elCaribe-CDN. Estaba lleno de planes, física y mentalmente energético, muy vital. Era inimaginable que unos días después no estaría entre nosotros. Dolorosa y repentina partida, pero elocuente también en cuanto a que Johnny vivió en plenitud hasta el final, como él hubiera querido; sin congoja ni disminución. Gracias por ti, “el Merengue, el Popular”. Hasta siempre. Descansa.