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Santo Domingo.- La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (Fao) recomendó a la población dominicana implementar hábitos de alimentación más saludables consumiendo mayor cantidad de frutas y evitando los productos con altos niveles de azúcar.
Recalcaron que las frutas y las verduras fortalecen el sistema inmunológico, especialmente en estos tiempos de la pandemia del coronavirus (Covid-19) ya que las propiedades nutricionales de estos alimentos ayudan a prevenir la obesidad, diabetes e hipertensión que pueden agravar el pronóstico de esta enfermedad.
Entre las frutas que la Fao recomendó para el consumo de producción nacional con una alta carga de nutricional como son el guineo, piña, coco, aguacate, brócoli y otros, los cuales se encuentran fácilmente en los mercados locales del país.
En tal sentido, la FAO hace un llamado de atención sobre la necesidad de reducir las pérdidas y desperdicios de las frutas y las verduras, sector muy sensible debido a su carácter altamente perecedero, así como a mantener las medidas para asegurar su calidad e inocuidad.
En esta campaña de comunicación participan como aliados el Ministerio de Salud Pública; la Secretaría Técnica de Soberanía y Seguridad Alimentaria y Nutricional (SETESSAN); la Organización Panamericana de la Salud (OPS); el Instituto de Nutrición de Centro América, Panamá y República Dominicana (INCAP); el Programa Mundial de Alimentos (PMA); el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (INABIE) y la Sociedad Dominicana de Nutrición Clínica y Metabolismo (SODONUCLIM).
Informaron que emitían las consideraciones porque el 2021 es el l Año Internacional de las Frutas y las Verduras y la FAO lanzó una campaña de comunicación para motivar a la población dominicana a adoptar hábitos de alimentación más saludables y equilibrados, basados en el consumo diario de estos alimentos.
Con el lema “Alimentos esenciales para tu salud”, la FAO destaca la importancia de incorporar una dieta nutricionalmente adecuada, promover estilos de vida saludables y estimular una demanda efectiva de alimentos apropiados, evitando el consumo de alimentos ultra procesados, altos en azúcares, sal, sodio y grasas trans y saturadas, por sus efectos perjudiciales para la salud.
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