Ayer cometí la temeridad masoquista de escuchar “música de calle” durante unas dos horas… y confieso que estoy arrepentido: ¿Por qué ofender tan gravemente el arte musical con tantas porquerías? ¿Cómo es posible tanta indecencia, vulgaridad y falta de respeto? ¿Cómo es posible que la llamada “generación del milenio” se haya degenerado tanto culturalmente y tenga tan pésimo gusto? Y aquí va lo de siempre: ¿Por qué no se aplica la ley de Espectáculos Públicos y Radiofonía a tanta basura seudo musical sexista que ofende la dignidad de la mujer? (De nuevo tienen razón quienes proclaman que este país se jodió).
